sábado, 5 de diciembre de 2015

CERA Y VELAS

Práctica consistente en derramar cera derretida y caliente sobre le cuerpo del sumiso/a, bien sea gota a gota o a chorros formando dibujos, iniciales, etc. Las zonas más comunes para la aplicación de cera son: los pezones, pecho, vientre, espalda, nalgas y órganos genitales.

Los juegos de cera son una forma de conseguir un especial placer
estimulando el tacto de la piel con minipunzadas en forma de puntiagudas sensaciones de quemazón muy puntuales. Es adecuado según la sensibilidad de la persona sometida.

Siempre mido el calor de la cera. Sabemos que el calor

varia si es de abeja o de parafina, y también transmite diferentes sensaciones, pero aun así dependiendo de su fabricación también varia. Es por eso que mido en mi piel el calor de la vela, tal y como se mide el calor de un biberón. Hay que cuidar al sumiso. 


Generalmente aplico diversas alturas 50cm de distancia a la piel para sensaciones suaves, 30 cm para sensaciones medias e inferiores a 30cm sensaciones fuertes. La cera sigue quemando una vez que ha tocado la piel, especialmente si la dejo caer sobre un mismo punto. Por lo tanto es fácil controlar la intensidad que desees en esta práctica.


Los juegos con cera generalmente se suele usar una vela de diverso
grosor, generalmente de 2 a 5cm. Aunque como puedes ver en las imágenes puede se de otros grosores depende del tipo de juego que queramos hacer.  

Como estas viendo estoy uniendo prácticas en sesiones. Aquí también hablo del uso de las velas. Estas no solamente pueden usarse para derramar cera, sino para jugar con ellas y los sumisos. Se pueden poner las velas en diversas partes del sumiso haciendo de el un candelabro, para muestra pongo algunas imágenes. Es simpático la sensación que se valla derritiendo y la cera caiga por los laterales mientras la vela se consume.  Las velas pequeñas con recipiente metálico transmiten una sensación de calor (pero cuidado mucho tiempo queman).


En este gráfico puedes ver donde se puede echar la cera, y donde no. Prácticamente la cara es la mas peligrosa pero por la cercanía a los ojos, y porque la sensibilidad de la piel es mas alta (tanto a reacciones como a sensibilidad). Las caras internas de las extremidades son sensibles, asi como todas las zonas mucosas (pene, lengua, ano, vagina).   El resto del cuerpo prácticamente hay vía libre.

El pelo es a veces un inconveniente para el tema de la cera, porque cuando se termina la sesión es más difícil quitarlo. Yo suelo untar de aceite a la persona si es una sesión larga de cera porque es más fácil retirarla. Puede retirarse una vez terminada la sesión o como parta de una "tortura".

¿Lo has probado alguna vez? seguro que te gusta!






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