sábado, 24 de junio de 2017

Salgamos de nuestras mazmorras y armarios bedesemeros


Rabia es lo que siento. Porque cojones no podemos expresar nuestros sentimientos. Y eso que entre los bedesemeros que conozco, yo soy uno de los que mas exterioriza mis sentimientos y relaciones. Es una lucha constante que tengo.

Leia ayer a Javier Soijotayo, quejarse de que en el programa First dates, no había visto alguien que buscase un Amo/a/sumiso/a para relación. Hace poco escribía a Exebarria autora del libro “Mas peligroso es no amar” (que expone diversos tipos de relaciones) que introdujese las relaciones bdsm, y recibí un tierno y educado no por respuesta. Y asi podríamos ir poniendo diversas situaciones, donde no se nos ve como relaciones, y muchas veces ni como relaciones sanas en juegos.

Estos días del WorldPride, cuando veo tantas banderas arcoíris, y tanta gente gay… me emociono. Pienso en todo lo que hemos conseguido, que el negocio de la esquina que antes nos miraba raro, ahora ponga una bandera. Que el vecino me diga, que bonita pareja hacéis cuando subimos agarrados de la mano. Que vea un concierto, abrazado al novio que quiero, y salte y baile, al lado de otros que sienten como yo. Si!! Me emociono!

Pienso en todo lo que hemos conseguido, la de horas y días que he entregado a la causa LGTB, en
militancia y asociaciones, y en los paseos dados agarrado de la mano o los besos en público. Pienso en todas aquellas personas encarceladas en los años mas grises, aquellos que fueron apaleados por sentir diferente, aquellos que dijeron “basta ya!” y salieron con banderas a la calle. Aquellas personas que tenían, rabia, pero también orgullo de lo que eran y ¡no les iban a callar!.

Pienso en esos héroes y heroínas, los de ayer, los de hoy y los de mañana. Y me siento orgulloso de ellos y profundamente agradecido. Pero a la vez siento rabia. Puedo mostrar en el 90% de las situaciones que soy gay, pero en muy pocas que soy bedesemero. Por eso me siento responsable de una doble lucha. Salir a la calle con cuero y porque no con mi perro con un collar, o con un anillo que ponga slave. En el terreno gay se que soy de los guerreros del hoy, que ya lo tienen casi todo conseguido, y solo hay que mantener posiciones, y conseguir poco a poco eliminar los resquicios de homofobia a base de amor y visibilidad. Pero en el BDSM, somos la primera línea de fuego. Y si bien la comunidad bedesemera apoyó la lucha de la comunidad LGTB, ahora cada bandera, cada beso dado en público, nos deberia retumbar dentro con un ¡si se puede! y darnos un empujón para conseguir nuestra normalización.

Hoy somos aquellas prostitutas, negros, “maricas” y utópicos, que se manifestaban en Stonewall o Bercelona. Pero antes de manifestarse, no hemos dado ni ese paso. Hay miles de grupúsculos diferenciados y enfrentados entre si. Encerrado cada uno en su mazmorra. Los bedesemeros protocolarios, femdom, petplay, fetichistas y un largo etcétera. Y mas alla nisiquiera hay unidad en esas corrientes, cada uno va a su puta bola. Buscando sus intereses y los de su ombligo. Rincones del ciberespacio como Facebook y Fetlife, en donde se presenta un novato y poco menos que se lo comen. Donde hay luchas encarnizadas en los debates. O donde se generan porterías ciber. Locales, donde yo no me junto con este porque tal, o mira este que hace tal, o…. ¿Dónde coño esta la comunidad?. Lo mas que veo son grupos de amigos, que incluso a veces se traicionan entre si.

¿Y eso es culpa del BDSM?. Sinceramente no, eso es culpa de la sociedad. Este mismo ambiente lo vemos en cualquier sector (asociaciones, hostelería, trabajo, deporte, etc). No hay un sentimiento de colectividad sino de individualismo. Y con el individualismo, es muy difícil defender derechos. Luchar contra eso es una lucha de titanes. Pero puede y debe hacerse.

Hay rayos de luz. Conozco a la comunidad bedesemera de Málaga y se que funciona a si, me llegan reseñas de Calabozo X en México y se que también funciona asi. Deberiamos ir generando comunidades, donde nos sintamos hermanos a pesar de nuestras diferencias, y que esas diferencias las veamos como enriquecedoras. Lo sé es difícil, pero piensa que si se da ese paso, también vas a tener brazos que se te acojan a ti, sino lo haces por el sentimiento de comunidad hazlo por egoísmo.

Y después pero durante también, ir haciendo gestos en la calle. La visibilidad es un punto muy importante. Cada uno sabrá que gestos puede y no puede hacer. Desde una conversación, que sin decir lo que eres, apoyes al mundo bdsm. Hasta salir con tu perro con una cadena por la calle. Todo con sencillez y amor. Sin alardes, sin ganas de generar espectáculo. Siendo conscientes de que nos miran, y que tenemos que ser ese ejemplo, en el que piensen “son raros, pero mira se quieren”. Porque es asi!, nos queremos, nos cuidamos. Las relaciones D/s sanas, son una relación de protección, de entrega y de cuidad. Cuando atas a alguien, se pone en tus manos, y tienes que estar con mil ojos cuidándolo. Cuando practicas fetichismo, ves mas hermoso aquel que lleva tus motivos de fetiche. Es un sentimiento exponenciado.

Ayer, estaba en Sol, encuerado y con mi novio sumisete, abrazandolo y saltando con el, era un concierto de Amaral. Y salió la canción Revolución, de fondo, retazos de vídeos de los primeros luchadores por la causa LGTB, comentaron que estaban alegres porque hace años, cantaron en un escenario de madera, en una pequeña plaza ante 200 personas, y hoy están en la puerta de Sol, en un mega escenario, con 20.000 personas, y siendo la capital mundial del orgullo gay. Ojala pudiese transmitiros lo que sentí en aquel momento. La canción dice asi “Somos demasiados y no podrán pasar por encima de los años que tuvimos que callar, por los libros prohibidos y las entradas secretas”… “Siento que llegó nuestra hora, ésta es nuestra revolución. Porque creo que éste es el momento de olvidar lo que nos separó y pensar en lo que nos une.”… los pelos como escarpias. Alegre por esos éxitos LGTB conseguidos a base de lucha pero con rabia por los derechos BDSM. Con ganas de transmitiros, que llegó nuestra hora, que despertemos, que creemos comunidad y visibilización. ¡¡Salgamos de nuestras mazmorras y armarios bedesemeros!!




4 comentarios:

  1. No hace falta añadir nada más.
    Aunque el primer paso, el primer cambio siempre debe de empezar con uno mismo.

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    1. Claro efectivamente, hay que empezar limpiando desde casa hacia el exterior

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  2. A diferencia de todo lo que implica lo L.G.B.T., todo lo que implica el B.D.S.M. tiene mucha connotación histórica detrás. Tal vez en el siglo 17 se hubiera logrado ver como algo completamente normal (de no ser por la Inquisición y todo eso), pero hoy en día hablarle de esclavitud a la gente, así sea sólo un juego, es demasiado complicado. :(

    Yo soy mexicano, y estoy en eso del B.D.S.M. desde hace ya varios años. El detalle es que ya me aburrí de las sesiones (no he tenido sesión donde no termine dando clases de B.D.S.M. ni explicando en qué consiste lo "fetish"), y yo busco cosas serias para 24/7 (soy esclav y, bisexual; tengo mucha historia atrás, pero eso lo guardaré para después). El no ser ni vivir en la Ciudad de México (la capital del país y el único lugar donde más o menos saben qué es "fetish") lo vuelve mucho más complicado (no sé cómo es la situación en España, pero los 31 estados de México son mucho más conservadores que el Distrito Federal, que es donde está la Ciudad de México). Si en mi país apenas entienden que hay gente con distintas preferencias, ¿qué se puede esperar si les digo que existen distintos tipos de relaciones afectivas? Eso, sin contar la discriminación (no sólo contra la gente con otras preferencias sexuales o de género, sino a los de piel oscura, como yo; ser nativo de México es complicado en Mëxico porque es como si no entendieran que hay gente de raza diferente a la blanca, que es lo que ven en la tele). :(

    El Facebook y el FetLife está lleno de gente bromista, poco seria, novata, "pajera", "poser", criminal y otras lacras más. Borré mi perfil del Facebook al final del 2013, y el del Fetlife, al final del 2014 por esa razón. La documentación sería que existe sobre el B.D.S.M. (que va más allá de "las cincuentas sobras de ese wey", como le decimos nosotros) esta en inglés (y en mi país a duras penas se habla mal español), y los pocos que saben sobre esas cosas están en CDMX, y lo saben porque viajaron a U.S.A. o a Europa, y de allí lo trajeron (y por lo tanto, pertenecen a la clase alta), o porque lo leyeron del Internet, y le entendieron "como el señor les dio a entender", como dicen por ahí (y pertenecen a la clase media, y "medio mascan" inglés). De ahí, que no sólo no se puedan unir, sino que tampoco logren acuerdos (salvo dos que tres grupos que existen por ahí, donde las diferencias por raza y clase social desaparecen hasta cierto punto). xD

    De no ser por todo lo anterior, y porque podría ser hasta ilegal, fundaría yo algo así como una casa-club B.D.S.M. para amos y esclavos de verdad metidos en esas cosas, con sus leyes y reglas, y así; algo más allá de un simple calabozo o mazmorra individual... Pero es sólo un sueño guajiro que tengo. xD

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    1. Tiene mas connotación histórica lo LGTB que lo BDSM, puedes encontrarte mas sobre este colectivo que sobre el otro. La inquisición, aunque fuese de los tribunales mas justos de la época (muchos querian ser juzgados por este tribunal que por el civil), no creo que pueda considerarse como BDSM.

      En cuanto a Fetlife y FB, tienes toda la razón, lo que mas abundan son esas especies.

      Uno puede hacerse tambien con material de calidad, leyendo en algunos blogs o comprando algunos libros que sean interesantes (y por no muchos pesos). la cuestión es quererele poner ganas.

      No se como es la casa-club que me comentas, pero según tengo entendido en MX no es ilegal hacerlo. De echo hay varios.

      Un abrazo

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