miércoles, 21 de julio de 2021

Tickling o cómo incorporar las cosquillas a tus juegos sexuales

Las cosquillas puede ser un juego aterrador o muy dulce. Además de una práctica sexual es también un fetichismo knismolagnia, forma parte de los fetichismos de acción. Hay muchas personas que las cosquillas les produce auténticos volcanes de placer en su cuerpo.

En su dia hice una pequeña reseña, ya que es una de las muchisimas prácticas que hago en sesiones y enseño en los talleres.  Y por lo tanto aparecen en algunos de los relatos reales de las sesiones. 

En este y con el siguiente artíclo, aprenderás bastante sobre el mundo de las cosquillas.



 

 

Cosquillas con las manos, la forma mas sencilla

Los dos roles, tickler y ticlee


Como en muchos juegos hay dos roles, que son necesarios para ejecutar muchas de las prácticas. En este caso, la persona que hace las cosquillas se le llama tickler, y la persona que recibe las cosquillas es tickle. Eso no necesariamente tiene que ser un rol de Dominante/dominado, sino, de dar y recibir cosquillas. Aunque si bien es cierto, una de las peores torturas que se pueden hacer son las cosquillas. He conseguido que alguien diga rojo con cosquillas que con dolor. Y es tan hermoso verles retorcerse.

En mi experiencia, este tipo de práctica, cuando está dentro de prácticas BDSMk, los roles están muy marcados, uno hace las cosquillas y el otro las recibe. Pero sino hay implicación BDSMk, suele ser muy frecuente que los roles se intercambien.

Si la persona que recibe las cosquillas es sumiso, el placer está además también en soportar el castigo que le impone su Amo. Se puede delimitar un tiempo o un nivel para ello. Igualmente se puede optar a la inmovilización con cuerdas, eso siempre dará un extra al tickler. Y por supuesto, se puede usar el semáforo o las palabras de seguridad. Créeme si te hacen cosquillas las vas a necesitar.

 

Cosquillas con plumas, un clásico

¿Con las cosquillas se puede llegar al orgasmo?


Ciertamente algunas personas pueden llegar al orgasmo usando las cosquillas. No olvidemos que estamos actuando sobre las zonas donde hay muchos nervios. No obstante, el fin de las cosquillas son las propias cosquillas, la reacción fisiológica de la risa, el retorcerse. El lado divertido del asunto está en el camino. El fin no es sólo provocar placer en la otra persona, sino, provocar diversas reacciones.  No se trata de hacer cosquillas 20 segundos, sino ir modulando. Ir manteniendo como si fuese una partitura musical, momentos de relax y momentos de subidón, con estados intermedios. Regulando la intensidad y el tiempo de las cosquillas. Una cosa que a mi me encanta es jugar también con el terror sin tocar. Vas acercando los dedos, y la persona ya dice “no no por favor”. En esta práctica es importante jugar con el humor y la ironía.

Algunos estudios muestran cómo los animales tienen más cosquillas si el que se lo hace es de su misma manada que si es uno externo, que puede valorarlo como una agresión.  Y nosotros somos animales, algunos más que otros. Así que, si se genera un vinculo antes de la sesión, con confianza y apoyo, siempre va a ser mas fácil que los dos os entreguéis más en la sesión. Y digo los dos, porque esta confianza beneficia también al tickler.


Las axilas, es un sitio donde las podrás descubrir

¿Qué reacciones se tienen con las cosquillas?


La principal reacción es la risa, y la segunda, los espasmos. Robin Ferner, profesor honorario de Farmacología Clínica en la Universidad de Birmingham (Reino Unido), publicó en el British Medical Journal (BMJ, 2013) la mayor revisión bibliográfica conocida sobre los efectos de la risa en el organismo. Y muestra cómo la risa afecta a todos estos niveles desde el punto de vista psicológico y psiquiátrico, cardiovascular, respiratorio, metabólico, obstétrico, otorrinolaringológico, inmunológico, neurológico, gastrointestinal, musculoesquelético y del tracto urinario, hasta el punto de que con las cosquillas podemos generar una especie de síncope muy parecido al subespace, ya que se genera una alteración de los arcos reflejos del sistema nervioso autónomo que leva a hipoperfusión cerebral global (pérdida brusca del conocimiento por bajada del flujo sanguíneo cerebral).

Cosquillas con plumón, suavidad
Así es un tickler, buscará la risa del otro, intentará hacerla cada vez más potente, escudriñar las diversas variaciones de cosquillas del otro. Y luego las reacciones del cuerpo, generalmente son espasmos involuntarios en la parte donde se está haciendo las cosquillas, y a veces se extiende a todo el cuerpo. Hay que tener cuidado, porque si la persona está con restricciones, puede general alguna dislocación o molestia en las articulaciones, ya que a veces se dan estímulos violentos involuntarios. Sino tiene restricciones, hay que tener cuidado con los movimientos que haga por si se pega contra las paredes, o si te da a ti. Y también puede ser muy excitante hacer cosquillas en las zonas donde la persona tenga un especia fetiche o sean más erógenas, como pueden ser los pies, las axilas o el cuello.


Una sensacción muy diferente

¿Cómo empezar la práctica del tickle?


Como todo, desde los niveles más suaves. Primero con una pluma, o bien con las puntas de los dedos. Explorando su cuerpo, y detectando cuales son las partes que más sensibilidad tiene. Dónde le provoca risa y dónde espasmos. Después ya se pasa a los dedos y a otras herramientas. Mas adelante os diré que herramientas se pueden utilizar.

Se puede modificar la sensibilidad de la zona aplicando calor, frío, lubricantes (hay algunos lubricantes que vibran). Cada uno reacciona de forma diferente a los estímulos. Esta en la labor del tickler ir explorando y encontrando tanto zonas como formas de hacer que el otro se ría y se retuerza.

En otro articulo, os explicaré las diversas formas en las que podéis usar las cosquillas, con qué materiales y hasta dónde se puede llegar. Ideas que estoy seguro que os sorprenderán.


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6 comentarios:

  1. Interesante articulo, como no podía ser menos, pero sigo siendo de los que las cosquillas, ni en pintura, jejeje ;-)

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    1. Claro, para gustos colores. No a todo el mundo le gusta todo.

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  2. Muy buen articulo, representa y describe perfectamente los sentimientos, sensaciones y formas que puedes tener de este morbo o fetiche desde ambos roles. Super divulgativo, ayuda totalmente a entenderlo e informarte por si algún día apetece probarlo ;P Mi mas sincera enhorabuena, porque ha conseguido tocar la fibra a un inexperimentado tickle.

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    1. Ey!, me alegro que te haya gustado. Muchas gracias por comentar. Eso se ha intentado, darlo a conocer un poco mas, y que a la gente le pique el gusanillo de jugar.

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  3. Soy Andrew del blog Aventuras...

    Como ya nos tienes acostumbrados un excelente post. Bien escrito, ameno y educativo.

    En mi caso las cosquillas no funcionan cuando me la hacen a mí.

    Pierdo morbo y excitacion, macho es como si me cambiaran el chip.

    Siendo yo el que hace cosquillas pues ha funcionado en par de ocasiones tanto con tíos como con tías.

    Gracias por el post

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  4. Más que interesante el post. En una ocasión conocí a una chica tickle... (No sabía que se llamara así). Nos lo contó en un local y pude ver una sesión de cosquillas... Me resultó muy curioso., Me encanta la diversidad!!!

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