Dirty Talk, tips para saber usar lenguaje sucio en la cama

Dirty Talk es usar un leguaje sucio. Muchas veces estoy seguro que has pensado en decirlo, pero no sabes qué decir, ni cómo, o lo has intentado y te ha salido mal. Y para mí es una de las herramientas más importantes a la hora de los juegos de cama y sobre todo, de los juegos de BDSM. Te daré unos tips, para que seas el rey del Dirty Talk.

Habrás escuchado por ahí la expresión follar la mente. Una de las formas de hacerlo es con el Dirty Talk. Cuando escuchamos y cuando decimos frases calientes el cuerpo se sensibiliza y se segregan hormonas para ello, entre ellas, la dopamina. Así que es perfecto para calentar motores, pero no solo debemos usarla en el inicio, sino, en el durante y en el después, como si fuese un lubricante psicológico.

Me siento ridículo

Normal. La sociedad te ha enseñado que el sexo es malo. Aunque hay muchos tabúes derribados, todavía hay ese olor a “gente no decente” cuando se habla de sexo. Hay una represión consciente e inconsciente. Y es normal que te sientas ridículo al emplear este lenguaje o que te de vergüenza. ¿Sabes como se pierde? Practicando. Ponte en la soledad de tu habitación y practica. Son importantes el volumen y el tono. Puede ayudarte el grabarte. Explora tu mente.

¿Y que es el Dirty Talk?

No es decir insultos por decirlos y quedarse tan fresco. Es expresar el placer y el deseo de forma sonora. Tiene que acompañar a lo que estamos mostrando físicamente.  Y entonces daremos nacimiento a todo un conjunto de sonidos y expresiones:

-Expresiones de cariño y amor. ¡Pero cómo! ¿qué tiene eso de Dirty?. Nada y todo. Recuerdo hace años cuando una persona me lo propuso y me fascinó. Yo no le conocía de nada. Expresiones del tipo “te deseo”, “eres mi vida”, mirándote a los ojos, mientras haces (lo que sea) puede llevarte a situaciones muy diferentes. Pruébalo.

-Frases de apoyo. ¿Y esto que es mas dirty?, ppppsss espera, slow sex. Haz que sepa como te gusta estar con él, como te gustan sus ojos (o las partes de su cuerpo que te gusten), cómo te ha puesto los pelos de gallina haciéndote esto o lo otro. Alaba las cosas que te gusta que te hagan. Eso os ayudará a crecer y a sentirte confortable con el otro.

-Fantasías. Haz que te diga (lo más detalladamente posible) las fantasías que tiene, o dile tu las fantasías que tienes con él. Lo que te gustaría hacer o sentir. Cómo has estado imaginando tal momento y lo que estabas haciendo mientras te lo imaginabas.

-Dí qué quieres que te hagan, pero dilo sensualmente. Y ahí ya, si tienes que cambiar la forma si estáis en plan D/s (dominación y sumisión), exigirlo dulcemente o suplicarlo. O quizás hablar con el lenguaje corporal, o llevándole desde el collar al punto donde quieras que se ponga.

-Gritos y gemidos. ¿Cuántas veces hemos oído el  “siiiiiiii”?. Eso también cuenta como Dirty Talk. Son los gritos, expresiones y exclamaciones del tipo “joodeeeerrr”, “no pares”, “sigue así”, “bufff” y cualquier tipo de gemido. Son muy importantes porque mostrarán como, lo que esta haciendo el otro, te gusta, o lo que le estás haciendo tú, y cómo ese momento está siendo placentero y disfrutado.

IMPORTANTE: Nunca mientas. El Dirty Sex desde sus expresiones más dulces a las más sucias puede reforzar el vínculo emocional. Pero nunca mientas, dí lo que sientas realmente. Si mientes es como si tirases piedras contra la relación y la dañas, dañas la confianza, mientras que si dices la verdad, construyes.  

Errores en el Dirty Talk, para prevenirlos acordar lo que te incomoda.

Siempre hay que acordar qué se puede decir y qué no, sino, en lugar de servir de lubricante, pueden atascar la relación que estás teniendo en ese momento. Algo que le haga click. Recuerdo hace años que solté un “bufff hijo de puta” mientras me estaba comiendo los pies, a un castellano. Era un momento vainilla. Su cara se cambió, y me dijo que por qué le insultaba. Fue un momento tenso, pero supe reconducir la situación.

Es importante que dejes claro a tu pareja lo que no te sienta cómodo escuchar (al igual que lo que te excite). Lejos de que parezcas mojigato, os hará tener mejores momentos. Si por ejemplo eres un chico y no te excita que te llamen “perra”, díselo.

En el lenguaje es lo mismo que con las acciones, hay que hablar sobre ellas. Imagina que no te gustan los meos y tu Amo, sin ton ni son, te orina.  Puedes aceptarlo, pero también te puede sacar de tu lugar como sumiso. Otra cosa es que quieras explorarlo, que lo hayas probado y no te guste (o simplemente la idea no te guste) y que con esa persona lo harías. Déjale claro que lo respetas y te preocupas por lo que quiere y también por lo que le horroriza. Luego ya tomarás tú las riendas como Amo o como lo que sea.

Es importante que respetes si has hecho el paso uno y la otra persona no le apetece, y no quiere hacer nada en ese momento. No es no. Ahora, como pareja, intenta explorar por qué es eso. Si simplemente dices no a tu pareja siempre, al final, buscará en otro sitio. Y se cansará de intentarlo contigo. Por eso es importante la comunicación.

También aquí hay que establecer unos límites, qué nos resulta excitante y que no, y nunca perder el respeto.

¿Qué tipo de lenguaje usar?

Aquí depende de la pareja y de tu cultura. Lo mismo puedes sacar un lenguaje de canalla de barrio, o ser más poético y elegante. Puedes probar a hablar en otro idioma, generalmente el ingles te llevará la mente a las películas porno. A mí, por ejemplo, el “Yes, Sir”, me encanta.  Una cosa que suele funcionar es “me encanta cuando haces X en mi Y”. Es fácil, sincero, sexy y sin florituras. Puedes jugar con los clásicos “polla”, “huevos”, “zorra”, “cabrón” que generalmente siempre funcionan. Precisamente porque son palabras que en un “ambiente de trabajo” no podrías decirlas porque serian tabú.

Y las prácticas en las que se puede usar Dirty Talk son infinitas, desde las que serían más básico usarlo como un rol puppy, infantilización, medical o de D/s a las que puede suponer una salsa muy interesante como el shibari. Imagínate atado y que estén haciendo explotar tu imaginación y tus sentidos.

Explorando una sesión de Dirty Talk

¿No sabes en qué lugar tienes que poner cada cosa?. ¿Te acuerdas de las figuras que hacíamos de pequeños? No puedes pretender poner un triángulo en la base y encima un cubo o dos cilindros, tiene que ser al revés. Todo tiene que tener su equilibrio.

Paso 1: Fuera de la cama

Tanto previamente por whatsapp como cuando estéis en la sala donde hagáis la sesión, empieza con algo no muy subido de tono. Dile que has estado pensando en él o que has soñado con él. Envía un audio con tono sensual. Haz algún comentario halagador o habla de lo que te gustó de un encuentro pasado. Pregúntale si ha pensado en ti. Si estáis cerca, acaricia sensualmente, susurra al oído. No es el momento todavía de ser grosero. No es un “cibersexo”, es un calentar motores.

Paso 2. Reacciona positivamente

Si te sigue el juego y reacciona positivamente, ve haciendo lo del paso 1, pero subiendo de tono. Que tus palabras hagan que tu compañero piense en el sexo, pero que sean naturales, no inventes, se tú. Os tiene que hacer sentir cómodos a los dos y que os vayan encendiendo poco a poco.

Paso 3. Luces, cámaras y acción

Este es el momento de empezar la sesión. Dale su collar, que lo bese. Ve acariciándole. Ve haciendo aquello que os gusta. La idea no es que la acción sustituya a la palabra, sino que se complementen. Si es algo mas cerdo, o algo mas sádico, o una relación de puppy… Cada tipo de relación tendrá sus reglas, sus gustos, sus palabras y acciones que os enciendan. Poco a poco intenta que tus gemidos y tus jadeos sean más sonoros. Muéstrale verbalmente a tu pareja como te gusta lo que estáis haciendo. Indícale cómo y qué quieres que te haga, o hacerle. Suplica, implora, o exige, depende el rol. Da rienda suelta a vuestra creatividad. Puedes usar el Usted en las sesiones 

Cuando le hayáis cogido práctica, incluso puedes castigar al sumiso a que no hable, con una mordaza, o hacer que hable más, con un aparato de electro, o hacer que hable sin alguna vocal. El lenguaje es una herramienta más para jugar.

 

Si quieres seguir profundizando en Dirty Talk puedes escribirme y organizamos un taller solo exclusivo de Dirty Talk de prácticas, entrenamiento y coaching, o bien,  dentro del taller “Follando la mente” que puedes ver en el blog de la BDSM Academy Madrid 

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